¿Qué es Somatización?

La somatización ocurre cuando las preocupaciones psicológicas se convierten en síntomas físicos. Por ejemplo, una persona que acaba de perder a un ser querido puede somatizar su dolor a través de una fatiga severa. El prefijo “soma” proviene de la palabra griega para cuerpo.

¿Un síntoma o un diagnostico?

Los síntomas somáticos pueden ir desde dolor en las articulaciones hasta la pérdida temporal de la visión. Aunque no tienen una causa física subyacente, los síntomas somáticos son muy reales.

La ausencia de problemas digestivos no cambia el hecho de que las náuseas de alguien le estén haciendo vomitar.

La somatización es un síntoma, no un diagnóstico en sí mismo.

A menudo es parte del trastorno de síntomas somáticos y del trastorno de conversión, aunque puede aparecer con otras condiciones. Las personas que experimentan somatización pueden recibir tratamiento de un profesional de la salud mental.

¿Cómo se puede identificar?

La mayoría de las personas experimentan somatización en algún momento de sus vidas. Vomitar por ansiedad, tener dolor de cabeza debido al estrés o sentirse físicamente débil después de un trauma son ejemplos de somatización. Pero estos casos suelen ser situacionales y temporales. La somatización se convierte en un problema clínico cuando causa ansiedad prolongada y grave.

Un individuo puede interpretar sus síntomas como una enfermedad corporal y consultar a un médico. Pero el médico rara vez encontrará una explicación física para los síntomas de la persona.

Si encuentran un problema físico, es probable que los síntomas estén relacionados con la afección de la persona o estén fuera de proporción con ella. (Por ejemplo, alguien que se rompió el tobillo en un juego deportivo puede informar problemas respiratorios).

Síntomas de la somatización

Los síntomas somáticos no son falsos o imaginarios. Las personas que experimentan somatización tampoco están fingiendo estar enfermas por ganancia personal, eso se llama simulación.

Los síntomas somáticos pueden no tener una causa observable, pero el dolor y la ansiedad son reales. Las personas con este problema merecen tanta compasión como aquellas con un diagnóstico físico.

La somatización es un síntoma principal del trastorno de síntomas somáticos (TSS). El TSS engloba los antiguos diagnósticos de trastorno de somatización, hipocondría y trastorno de dolor.

El Manual Diagnóstico y Estadístico (DSM-5) afirma que alrededor del 75% de las personas diagnosticadas con hipocondría ahora califican para el TSS.

El DSM-5 estima que el 5-7% de la población general tiene TSS. Alguien con TSS tendrá al menos un síntoma somático durante 6 meses o más. Un individuo puede tener diarrea persistente, palpitaciones cardíacas, falta de aire, y así sucesivamente. El dolor es un síntoma común.

Sin embargo, simplemente tener un problema médico inexplicable no es suficiente para calificar para el TSS. La persona también debe mostrar problemas psicológicos.

Algunas consideraciones…

La persona puede obsesionarse con los síntomas y dedicar un tiempo y energía excesivos al problema de salud. Te recomendamos leer el siguiente artículo sobre la ansiedad y el miedo a enfermar.

Su ansiedad a menudo es desproporcionada al riesgo que plantean los síntomas. La persona puede seguir sintiéndose ansiosa incluso después de que un médico les asegure que su condición no es peligrosa.

En casos graves de TSS, una persona puede estructurar su vida diaria en torno al síntoma somático. El problema puede convertirse en una parte clave de su identidad y relaciones. Un individuo puede ser reacio a creer que sus síntomas somáticos tienen raíces psicológicas.

El TSS a veces puede ser un diagnóstico controvertido. Muchas afecciones neurológicas, incluyendo la fibromialgia, han sido previamente consideradas como síntomas somatizados porque los médicos no podían encontrar una razón para el dolor de las personas.

Los últimos criterios buscan evitar más errores al requerir ansiedad psicológica. Simplemente tener una dolencia inexplicable ya no es suficiente para calificar para el trastorno de síntomas somáticos.

Trastorno de conversión

La conversión es otro trastorno relacionado con la somatización. Una persona con problemas de conversión puede parecer que su sistema nervioso (cerebro, columna vertebral, neuronas, etc.) no funciona correctamente.

Pueden tener dificultades con el movimiento voluntario o experimentar cambios en sus sentidos corporales.

Los síntomas

• Debilidad muscular o parálisis
• Movimientos anormales como temblores
• Convulsiones no epilépticas
• Pérdida de los sentidos: ceguera, sordera o entumecimiento físico
• Dificultades del habla

Para dar un diagnóstico de conversión, el clínico debe ser capaz de demostrar que los síntomas son incompatibles con el problema neurológico asociado. La incompatibilidad se demuestra a menudo mediante la realización de múltiples pruebas.

Por ejemplo, una persona con ataques no epilépticos puede agitar sus extremidades y parecer que pierde la conciencia.

Pero cuando un médico usa un electroencefalograma para ver la actividad de su cerebro, los patrones del cerebro no coinciden con los de la epilepsia o muestran otras anormalidades.

Esto no significa que la persona esté fingiendo una convulsión, sino que la convulsión no es causada por cambios físicos en el cerebro.

¿Qué causa la somatización?

Existen muchas teorías sobre por qué ocurre la somatización. Estas teorías involucran:

Sensibilidad biológica

Una persona puede tener una sensibilidad elevada a ciertas sensaciones, como el dolor o las náuseas. Pueden ser más propensos a atribuir estas sensaciones a una enfermedad.

Una persona también puede interpretar erróneamente los síntomas psicológicos, como sudores ansiosos, como una causa física.

Trauma/Estrés

La investigación muestra que los sobrevivientes de trauma son particularmente susceptibles a la somatización.

El trauma puede llevar a niveles altos de cortisol y otras hormonas. Estas sustancias químicas pueden debilitar el sistema inmunológico y causar síntomas físicos como mareo.

El inconsciente

La somatización podría ser un mecanismo de defensa que protege a la persona de la abrumación emocional.

Algunos síntomas psicológicos pueden ser tan abrumadores que una persona no puede enfrentarlos conscientemente.

La ansiedad de una persona puede encontrar un escape a través del cuerpo, convirtiéndose en un síntoma físico.

Actitudes culturales

Algunas personas pueden vivir en una cultura que estigmatiza la ansiedad emocional.

Una persona puede recibir más atención y simpatía cuando presenta síntomas físicos que cuando informa problemas psicológicos.

La mente y el cuerpo de una persona pueden “aprender” a somatizar la ansiedad para obtener ayuda.

Palabras finales

La somatización puede ser causada por múltiples factores. También puede no tener una causa perceptible. Independientemente de por qué ocurre la somatización, los síntomas son reales y causan ansiedad.

Las personas que experimentan somatización pueden obtener tratamiento buscando un terapeuta.

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