Ansiedad en parejas: ¿Cómo identificarla?

La relación de parejas es una de las necesidades más comunes entre las personas, en donde se busca construir un vínculo íntimo y seguro para proyectarse en la vida. Sin embargo, no todo es color de rosa y muchas veces ciertas conductas puede activar la ansiedad en parejas.

¿Qué es la ansiedad en parejas?

La ansiedad en parejas es una manera de referirse a la respuesta ansiosa que se activa frente a la potencial amenaza que representan factores, situaciones o creencias asociadas a temáticas propias de la pareja.

Diversos autores señalados la importancia de la relación que existe entre las relaciones de pareja y la salud mental. Para Fromm (1956) en su best seller: “el arte de amar”, señala que la relación de pareja representa una relación de seguridad y cuidado, en la que las personas se siente nuevamente la seguridad del amor que sintieron cuando fueron personas cuidadas (Principalmente etapa de infancia temprana).

Por esta razón, pensar en que la relación se pueda acabar -sin importar por cual sea la razón del término- provoca una gran angustia en las personas, la que puede gatillar síntomas ansiosos, generar problemas innecesarios para la relación, entre otros.

Por tanto, el solo pensar en perder la relación, la persona amada, se vuelve una situación muy amenazante (por el dolor que provocaría) e incierta (por no saber cómo). Entonces, la pregunta clave es ¿cómo reaccionamos frente a lo que nos parece amenazante y/o incierto? Con Ansiedad.

Señales preventivas para la ansiedad en parejas

Existen dos grandes maneras de tratar la ansiedad: o aprendo a prevenir la activación de los síntomas, o me expongo a lo que me causa ansiedad.

Las siguientes preocupaciones pueden ayudarte a identificar si la ansiedad que sientes está relacionada con tu relación de pareja.

• Me preocupa que las discusiones lleven a una ruptura en nuestra relación.
• Busco continuamente la confirmación de que soy atractivo o interesante.
• Soy muy celoso(a) de que mi pareja encuentre atractivas a otras personas.
• Me preocupa estar solo(a) si esta relación no funciona.
• Me molesta si no tengo noticias de mi pareja con la suficiente frecuencia.
• Me resultaría traumático si nuestra relación terminara.
• Me preocupa estar solo(a) para siempre.
• Me he metido en relaciones simplemente para evitar estar solo(a)

¿Te sientes identificado(a) con alguna?

Si la respuesta es sí, pues ya tienes una primera señal para comenzar a trabajar en la ansiedad relacionada con tu pareja.

Las peores formas de manejar la ansiedad en parejas

Según el Dr. Robert Leahy (2005), señala que básicamente las reacciones más comunes que tienen las personas cuando están sintiendo ansiedad por su relación de pareja, son:

1. Buscar evidencia que te demuestre que tu pareja está perdiendo interés en ti.
2. Buscar señales de que tu pareja pueda estar interesada en otra persona.
3. Chequear horarios, conductas, rutinas, o incluso, elementos personales como sus redes sociales, en búsqueda de alguna posible infidelidad.
4. Comenzar a empezar a enfocarte en lucir y actuar perfecto, como respuesta a buscar su interés.
5. Devaluar a las personas que tu pareja muestra interés o está en una relación no-amorosa, como sus colegas de trabajo o amistades.
6. Comenzar a mostrar una actitud de desacuerdo con lo que te plantea.
7. Renunciar o dejar de lado sus propias necesidades o intereses, para no enemistarse con su pareja.
8. Incluso también, al momento de elegir tu pareja, si el criterio es haber elegido a la persona “menos deseables socialmente y más necesidades afectivas”, con tal de creer que te brindará seguridad (¡ojo! Este es el comienzo de las relaciones tóxicas)
9. Intensificar las discusiones para romper o dañar la relación, antes de que lo dejen.
10. Comenzar a tener potenciales relaciones paralelas, “por si se terminará la actual”. .
11. Evitar la inevitabilidad de la pérdida eligiendo relaciones sin salida, por ejemplo, cuando se tienen hijos con el fin de que “se unan como parejas”.

Estrategias para manejar la ansiedad en parejas

La ansiedad es una respuesta a las situaciones que me parecen amenazante o inciertas. Por tanto, lo que te parece amenazante a ti, no es lo mismo que a mí, ni a cada persona. Todos vivimos la ansiedad de forma distinta, pero si tenemos algo en común: los sesgos con los que interpretamos la realidad, cuya interpretación puede activar los síntomas ansiosos.

Identificar tus sesgos, te ayudará mucho a entender tu respuesta ansiosa en relación a tu pareja. Cuando lo identificas, sabes cómo trabajar.

En cuanto a la ansiedad en parejas, suele activarse porque una o ambas partes, tienen un sesgo que activa la ansiedad. ¿Cuáles son estos sesgos? Los más comunes son:

El abandono

El miedo al abandono es uno de los más comunes en nuestras vidas, por lo que para que puedas trabajarlo, tienes que aceptar la idea de que las relaciones “no siempre son para toda la vida” -como en épocas anteriores se pensaba- y que también puedes ser tú el que abandone.

“Siempre es sobre mí”

Si eres de esas personas que en una relación tiene que girar todo -incluido tu pareja- en torno a tus deseos, a tus necesidades, a tus rutinas, entonces… ¿de verdad quieres estar en pareja? ¿No es la pareja una relación de a dos?

Cuando tratas de hacer la relación para tus necesidades, es muy probable que los conflictos comiencen a aparecer cuando la otra parte quiere hacer cosas individuales o contigo, o simplemente no te quiere acompañar. ¿Está mal eso?

“tengo que averiguar lo que está pensando”

Cuando tienes la creencias de que “sientes” que están pasando cosas con tu pareja, pero no tienes seguridad de lo que está ocurriendo, te llevará a acciones que pueden terminar con la pareja.

Por ejemplo, si comienzas a sospechar que hay una 3 persona, y comienzas a controlar horarios, preguntar con quién estaba o saldrá, o incluso chequear las redes sociales, crearás conflictos que no necesariamente son reales, pues “tu CREES que están pasando cosas y actuaste en base a esa sospecha”.

“necesito la seguridad de que le gusto”

Las relaciones de pareja siempre tienen una etapa inicial idílica, en donde se vive la fase del enamoramiento y se viven aquellas conductas románticas y platónicas. Pero si la relación continua su crecimiento, esta fase es natural que comience a desaparecer y la relación como a ser más “real” (“amar con los pies en la tierra”).

Por tanto, aquí es común que las personas caigan en las rutinas que tenía previamente al momento de enamoramiento, por lo que es natural que esas conductas románticas disminuyan su intensidad.

Entonces, si eres de esas personas que necesita constantemente la reafirmación de la otra parte, entonces tu ansiedad puede comenzar a aparecer luego del enamoramiento.

Ahora, si siguen juntos, ¿por qué necesitas constantemente esa validación?

“No puedo estar en conflicto”

También es muy común en personas introvertidas o que tienen una asociación cognitiva de que “conflicto = problemas”. Por tanto, buscan evitar a todas formas que se dé un conflicto y para ello -muchas veces- terminan cediendo, postergándose y casi como “acompañando en la relación”, no se hacen parte activa de ella.

Pero fíjate, un conflicto no necesariamente es un problema, un conflicto representa una contradicción entre las partes, en que las posiciones son opuestas o distintas. Desde cosas tan simple como elegir un almuerzo o un viaje, hasta como cosas importantes, como los definir los criterios y roles en la crianza o tomar decisiones financieras en la pareja.

No enfrentar el conflicto, crea nuevos conflictos, por lo que la principal estrategia es aprender a negociar, aprender a exponer puntos de vista y aprender a tomar acuerdos.

“No soy nada sin esta relación”

Si eres de esas personas que siente que, si pierde la relación, perderá su vida, su felicidad, su ser…. Primero te pregunto, ¿qué eras antes de la relación? ¿nada?

Claramente eras alguien y podrás seguir siendo ese alguien en caso de que la relación termine. No tengas miedo de que el término afectará quién eres, estarás triste -no lo niego- pero tu esencia será la misma o incluso mejor, por lo aprendizajes que tendrás en caso de que termine.

Entonces para trabajar esta idea, tienes que comenzar a des-idealizar la relación, pues este sesgo ocurre cuando la persona idealiza su relación como un todo, pero en la práctica, la relación cumple ciertas funciones en la vida y satisface solo ciertas necesidades.

Por tanto, pregúntate: ¿qué necesidades satisfago con mi pareja y cuáles no? ¿qué me entrega mi pareja que no me puedo entregar yo? ansiedad por miedo a enfermar

Reflexión

La ansiedad en parejas siempre está relacionado con los elementos personales de cada una de las personas de la relación. No es la relación el problema, sino la forma en que construyes y te relacionas con la otra persona.

En esto aparecen los miedos más profundos o dolores, pues siempre la relación romántica es un baño de felicidad que nos recuerda aquellas etapas en que éramos cuidados y nos sentíamos seguro (infancia). Y como la infancia no la recuperamos, entonces muchas veces la pareja nos hace sentir esas emociones tan puras de alegría y felicidad.

Por esto, que es importante que antes de entrar a una relación trabajes en ti, en tus miedos, en tus sesgos, en tus traumas para que una vez que estés en una relación, no aparezcan y saboteen tu relación.

Referencias

• Leahy, R (2005) The Worry Cure.
• Fromm, E (1959) El arte de Amar.
• Fromm, E (1958) El amor a la vida.
• Sternber, R (1995) Teoría triangular del amor.